Especialistas internacionales se dieron cita el 9,10 y 11 de noviembre en el campus Lima.
Por Silvia Torres. 16 noviembre, 2012.Con gran acogida se desarrolló en Lima el III Congreso Internacional en Reconocimiento de la Fertilidad que reunió en su tercera edición a 21 ponentes de 9 países para analizar la importancia del reconocimiento de la fertilidad, la defensa de la vida y la familia.
El evento, realizado en el Polideportivo de la Universidad de Piura, abordó los más importantes aspectos sobre el reconocimiento de la fertilidad, tales como la educación sexual en la familia, el reconocimiento de esta corriente como parte de la agenda de salud pública, así como el resguardo de la naturaleza de la reproducción y de los métodos naturales.
Durante la primera sesión, los asistentes participaron de la mesa redonda denominada “Una educación de la sexualidad desde el reconocimiento de la fertilidad”, que contó con la participación de los especialistas Francisco Marcó, Concepción Medialdea, Benjamín Zamudio y Fernando Carbone. Este último, destacó la importancia de la figura paterna en el reconocimiento de la fertilidad: “Trabajar, lo mas tempranamente posible, con los padres de familia en la generación de competencias y capacidades para abordar y orientar adecuadamente a la formación equilibrada de la sexualidad de sus hijos, es algo estratégico y necesario”.
Por su parte, el especialista mexicano Benjamín Zamudio reflexionó sobre la importancia de la enseñanza de los métodos de reconocimiento de ovulación en las instituciones formativas. Expuso, además, su experiencia en la Escuela de Medicina de la Universidad Panamericana de México. “La estrategia para que las escuelas de medicina y enfermería de las universidades enseñen el reconocimiento de la fertilidad en forma natural, toca encabezarla a los responsables de los departamentos de bioética de las universidades, quienes tienen los recursos y los elementos para convencer a las autoridades que estos conocimientos benefician al hombre, preservando su dignidad y su salud”.
La segunda fecha del evento se inició con la mesa redonda dedicada al tema “Ciencia y ética se unen en el área del reconocimiento de la fertilidad”, a cargo de los especialistas Marco Antonio Gracia Triñaque de México, Rafael José Cabrera Artola de Nicaragua y Hugo O.M. Obiglio de Argentina. A su turno, Cabrera Artola resaltó la importancia ética de salvaguardar la naturaleza humana de la concepción: “Los métodos anticonceptivos por su misma connotación de actuar contra natura no pueden ser aceptados, pues trastocan la ecología femenina en sus aspectos físicos y psicológicos, convirtiendo a la mujer en un objeto y despojándola de su propia historia”.
De forma complementaria, los especialistas resaltaron que es de suma importancia, en el camino del reconocimiento de la fertilidad, valorar el aporte de la Naprotecnología: “Es más exitosa que la Fecundación in Vitro, no tiene efectos negativos en la salud de los embriones, neonatos y mujeres e incluso cura las enfermedades subyecentes de la infertilidad. El establecimiento de la Naprotecnología en la perspectiva de salud pública debería ser impostergable”; opinó el especialista Alejandro Leal Esquivel, de Costa Rica.
Uno de los puntos más debatidos en este encuentro internacional fue la relación del reconocimiento de la fertilidad con la paternidad responsable. La mesa encargada de este tema estuvo conformada por María Constanza Ferreire, María Concepción Morales Peralta y Martha Tarasco Michel. A su turno, María Concepción Morales fue enérgica en su propuesta: “Propongo que todas las conferencias episcopales exijan el aprendizaje de los Métodos de Reconocimiento de la Fertilidad a todos los que pidan el sacramento del matrimonio y extenderlo como requisito indispensable al matrimonio civil”.
Finalmente, la especialista destacó la importancia de llevar a la práctica todo lo analizado en el congreso: “Actualmente en el área de salud y la sexualidad reproductiva no se encuentran líneas de investigación en relación con los métodos de reconocimiento de la fertilidad, por lo que se hace necesaria la investigación y publicación de esfuerzos para lograr el reconocimiento de su utilidad”.